Wally anuncia con orgullo la venta del primer casco del nuevo yate de vela wallywind110 a un cliente apasionado y fiel, miembro de la familia Wally desde hace tiempo.
“La tradición de la vela de Wally es legendaria y, con la guía del Grupo Ferretti, la marca está redoblando sus esfuerzos en este sector. Gracias a la venta de este nuevo superyate de vela en fibra de carbono, Wally prosigue su importante contribución a la innovación del diseño y de la tecnología en el sector de la vela”, explica Stefano de Vivo, Managing Director Wally. “Cuando un cliente se dirige a Wally, sabe que puede contar con los estándares más elevados y estamos sumamente orgullosos de la confianza que este armador, experto y exigente, está depositando en nosotros una vez más. El wallywind110 representa la llamativa excepción en un sector literalmente abarrotado de yates de vela y estoy seguro de que llamará la atención del público cuando navegue en el Mediterráneo en el verano de 2024”.
“Los armadores Wally son nuestra familia y me siento muy orgulloso al ver que siguen eligiéndonos para construir sus sueños en el agua. Desde el principio hemos sabido prestar atención a sus deseos y transformarlos en las características únicas de sus yates, consiguiendo siempre superar sus expectativas gracias a la experiencia y al know-how de Wally”, añade Luca Bassani, Fundador y Chief Designer Wally.
Dotado de todos los elementos del estilo inconfundible y eterno de Wally, el wallywind110 es un barco seguro y confortable que sin embargo se precia de un pedigrí de altas prestaciones. El proyecto une una vez más la arquitectura naval de judel/vrolijk & Co. con las líneas interiores y exteriores realizadas por el equipo Wally y por el estudio de diseño Santa Maria Magnolfi. El fruto de esta colaboración es una embarcación con líneas esenciales y elegantes, típicas Wally, capaz de proporcionar estabilidad y prestaciones realmente asombrosas.
El wallywind110 es un verdadero híbrido, porque ofrece los volúmenes y el confort de un yate con talamete, pero con el espíritu y las prestaciones de un barco de regata flush-deck. El salón elevado y el concepto de la terraza con vistas al mar resaltan al máximo la elegante área social, mientras las líneas seductoras garantizan pasajes rápidos y cómodos, y giros veloces alrededor de las boyas.
La enorme cabina de 80 m 2 se extiende en un único nivel y ocupa todo el bao del barco, con el mismo volumen que se encuentra a bordo de los yates de vela de 150 pies más innovadores. El diseño es totalmente personalizable y ofrece asientos para 15 personas.
La personalización prosigue bajo cubierta: gracias a la sala de máquinas colocada bajo el salón, los invitados disponen de un amplio y refinado open space para charlar, comer y trabajar. Una única claraboya atraviesa longitudinalmente todo el talamete bajo, donde ojos de buey junto con los ventanales del casco transforman este espacio en una sala de estar soleada.